El escándalo por los audios de Karina Milei sigue escalando y un canal de streaming uruguayo reveló nuevos. El presidente Javier Milei publicó un mensaje en el que apuntó una vez más contra la prensa y sostuvo que “hay espías disfrazados de periodistas” detrás de las grabaciones, cuya difusión ayer fue parcialmente prohibida por el juez federal Alejandro Maraniello.
“A cada paso sigue quedando en claro la red de espionaje ilegal de la que un grupo de periodistas ha sido parte”, expresó el mandatario desde su cuenta verificada de X. Y agregó: “Estos espías que se disfrazan de ’periodistas’ quieren desviar la atención del tema real”.
El Presidente refirió así a los audios que este martes fueron publicados por el canal de streaming uruguayo Dopamina, luego del fallo judicial que censuró su difusión en medios argentinos. Allí la hermana del Presidente hace mención a Martín Menem y destaca su rol como referente del oficialismo en el Congreso.
De hecho, Milei posteó su mensaje replicando una publicación previa del aludido presidente de la Cámara de Diputados quien salió a aclarar que el audio de la secretaria general de Presidencia fue grabado “de manera ilegal”.
“En primer lugar, quiero aclarar que ese audio, en el hipotético caso de que fuera real, pareciera haber sido grabado de manera ilegal en la Presidencia de la Cámara de Diputados”, expresó Martín Menem, que fue la primera voz oficial que se expresó públicamente sobre el tema.
“Estos encuentros se realizan periódicamente para coordinar la labor parlamentaria y consolidar el trabajo legislativo de La Libertad Avanza. La línea y las instrucciones dentro del Congreso se definen en este ámbito, y la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, participa para aportar conducción política y asegurar que la labor legislativa esté en plena sintonía con el rumbo que impulsa el presidente Javier Milei junto con todo el Poder Ejecutivo”, siguió.
Casi en simultáneo, y también en redes sociales, Patricia Bullrich adelantó que ampliará la denuncia judicial por presunto espionaje ilegal que presentó el martes. Pero, a diferencia de Menem que buscó poner en duda su autenticidad, la ministra dio por hecho que “el audio que publicaron hoy fue grabado en la Presidencia de la Cámara de Diputados, otro poder del Estado democrático violado”.
La denuncia original del Gobierno habla de una “operación de inteligencia ilegal” supuestamente destinada a desestabilizar el proceso electoral y en el que incluyó a periodistas como Jorge Rial y Mauro Federico. Hacía referencia a los primeros audios de la secretaria de la Presidencia, que fueron difundidos el viernes.
La causa recayó en el juzgado federal número 12, que es subrogado por Julián Ercolini, y en la fiscalía de Carlos Stornelli.
Poco después de judicializar la filtración de las grabaciones, el vocero presidencial Manuel Adorni informó que “la Justicia ordenó el cese inmediato de la difusión de los audios grabados ilegalmente a Karina Milei en Casa Rosada”.
Según el posteo del funcionario, con esa decisión, -en ese caso del juez Alejandro Maraniello, federal en lo civil y comercial- interpretó que “reconoció que se trata de una violación grave a la privacidad institucional y no un caso de libertad de expresión”.
Este martes, el portavoz y legislador porteño electo habló de espionaje político y planteó que las grabaciones fueron guardadas durante meses para difundirlas en la recta final de la campaña electoral. “La diferencia es clara: nosotros nos reunimos para construir, ellos espían para desestabilizar”, sentenció.