La Justicia argentina dio un giro inesperado este martes al conceder la prisión domiciliaria al exgobernador de Tucumán y exsenador nacional José Alperovich, condenado a 16 años de prisión por abuso sexual agravado contra su sobrina. La resolución, firmada por el juez Juan María Ramos Padilla del Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional Nº 29, marca el fin de más de un año de detención en el penal de Ezeiza y permite a Alperovich cumplir su pena en un departamento de su propiedad en Puerto Madero, Buenos Aires. La decisión, tomada tras reiterados pedidos de su defensa basados en razones de salud y edad avanzada, ha desatado un torbellino de reacciones, desde la indignación de sectores sociales hasta el alivio de sus allegados, en un caso que sigue resonando en la política nacional.


Alperovich, de 70 años, fue hallado culpable el 18 de junio de 2024 de nueve hechos de abuso sexual, incluyendo seis casos agravados con acceso carnal y tres simples (dos en tentativa), cometidos entre diciembre de 2017 y marzo de 2018. La sentencia, respaldada por el fiscal Sandro Abraldes, incluyó su inmediata detención y una inhabilitación perpetua para cargos públicos, tras probarse que abusó de su posición de poder como jefe de la víctima, quien trabajaba en su equipo. Sin embargo, la reciente resolución priorizó su estado de salud, citando un severo dolor de columna que limita su movilidad, un argumento que su defensa usó para justificar la morigeración de la pena.


El traslado a Puerto Madero, programado para mañana, incluirá condiciones estrictas: una caución de 400 millones de pesos, el uso de una tobillera electrónica y la prohibición de contacto con la víctima o su familia. A pesar de estas restricciones, la medida ha generado controversia, especialmente porque el departamento señalado fue uno de los lugares donde ocurrieron los abusos, según la denuncia. La defensa lo celebra como un reconocimiento a su deterioro físico, mientras que organizaciones de mujeres y voces en redes sociales lo ven como un privilegio injusto para un político poderoso.


Un caso que divide opiniones
La decisión llega en un contexto de alta sensibilidad. Alperovich, detenido desde junio de 2024, había visto rechazados múltiples pedidos de excarcelación por la Cámara Nacional de Casación Penal, que consideró un riesgo de fuga debido a sus recursos económicos y contactos. Sin embargo, el cambio de criterio de Ramos Padilla se basa en evaluaciones médicas recientes, un punto que su defensa destaca como clave. “Su condición de salud no permite un encierro prolongado”, afirmó un abogado cercano, aunque no se divulgaron detalles específicos del informe.


En Tucumán, la noticia ha reavivado el debate sobre la justicia y el poder. Mientras algunos defienden la humanización de la pena para un hombre de avanzada edad, otros, incluidos movimientos feministas, la califican de “impunidad disfrazada”. En las calles de San Miguel, comentarios como “la plata siempre gana” reflejan el escepticismo popular, alimentado por la percepción de que Alperovich usó su influencia para suavizar su situación. La víctima, cuya identidad se protege, no ha hecho declaraciones públicas, pero su valentía en el juicio sigue siendo un símbolo para quienes luchan contra la violencia de género.


El caso también tiene implicancias políticas. Con el peronismo local dividido tras su condena, la medida podría reavivar tensiones internas, especialmente en un año preelectoral. El gobierno de Javier Milei, que ha mantenido distancia, podría enfrentar presión para responder, dado su discurso anticorrupción, mientras la oposición busca capitalizar el descontento.


Un Futuro Incógnito
Aunque la prisión domiciliaria alivia la situación de Alperovich, la condena de 16 años sigue firme, pendiente de apelaciones ante la Corte Suprema. La decisión de Ramos Padilla no modifica la gravedad del veredicto, pero sí reabre el debate sobre los límites de las medidas alternativas en casos de delitos graves. Mientras tanto, Tucumán y el país observan cómo este caso, que expuso las sombras del poder político, seguirá marcando la agenda en los próximos meses.